Arrestan a cibercriminales que robaron 45 millones de dólares con tarjetas de crédito falsas

La policía estadounidense ha arrestado a siete personas en Nueva York acusadas de haber participado en un robo multimillonario tras haber irrumpido en la base de datos de tarjetas de crédito pre-pagadas de dos bancos del medio oriente. En sólo unas horas, los cibercriminales coordinaron la extracción de 45 millones de dólares desde cajeros automáticos de 27 países.

Las autoridades afirmaron que también se realizaron arrestos fuera de los Estados Unidos, pero no se han publicado detalles al respecto. También se mencionó a otro sospechoso estadounidense que murió asesinado en abril.

El ataque comenzó con la intrusión a los sistemas de dos bancos: Banco Nacional de Ras Al-Khaimah PSCuno, de los Emiratos Árabes Unidos, y Banco de Muscat, de Omán. Después de robar la información necesaria para llevar a cabo el robo, los atacantes ampliaron el límite de retiro de efectivo desde los cajeros automáticos.

La operación, conocida en Internet como “Unlimited Operation”, se llevó a cabo entre octubre de 2012 y abril de 2013. En este período, los líderes fabricaron tarjetas de crédito falsas alterando otro tipo de tarjetas magnéticas, como las que se usan para canjear regalos en supermercados y tiendas. Después utilizaron los datos robados para convertirlas en tarjetas de crédito prepagadas y las distribuyeron entre sus cómplices de todo el mundo.

Los delincuentes coordinaron el retiro desde cajeros en 26 países, incluyendo Canadá, Japón, Inglaterra y Rumania, entre otros. El retiro se realizó de forma simultánea para que el robo pasara desapercibido ante el banco y las autoridades. En total, los delincuentes retiraron 45 millones de dólares en dos ataques: en el primero robaron 5 millones, y en el segundo, que duró 10 horas, robaron 40 millones en 36.000 transacciones.

“Las nuevas tecnologías y el rápido crecimiento de Internet han eliminado las barreras tradicionales de los crímenes financieros”, opinó Steven Hughes, agente del Servicio Secreto de los Estados Unidos. “En vez de armas y máscaras, esta organización de cibercriminales empleó ordenadores e Internet”, agregó la abogada de la fiscalía, Loretta Lynch. Escrito por Gabriela Villarreal

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