AMD en problemas, “difícilmente puede ser vendida”

Imagen: Sede de AMD en Sunnyvale, California, EEUU (Fotografía con licencia de Wikimedia Commons).
Debido a acuerdos complejos y parcialmente secretos con Intel, comprar AMD no resulta atractivo para potenciales interesados, como Qualcomm o Samsung.

Diario Ti: Nuevamente, AMD está en dificultades. Analistas pronostican resultados sombríos para el tercer trimestre fiscal, y según algunas versiones la compañía estaría preparando rondas de despidos. En esta situación, es propio preguntar si la solución para AMD quizás sería encontrar un comprador.
Según información extraoficial que circuló en agosto pasado, Qualcomm y Samsung habrían manifestado interés por comprar AMD. Luego de algunos desmentidos, tales versiones se extinguieron. El sábado 13 octubre, el analista Arik Hesseldahl, especialista en la relación entre AMD e Intel escribió en el blog de All Things Digital que la venta de AMD es altamente improbable.

La razón no sería que AMD no fuese atractiva para Qualcomm, que al comprar AMD agregaría importantes sinergias a su cartera de negocios. Tampoco el precio sería un problema; Qualcomm tiene reservas económicas de 13 mil millones de dólares, mientras que el valor bursátil total de AMD no supera los 2 mil millones de dólares.

El problema sería más bien la compleja relación entre AMD e Intel. Según Hesseldahl, AMD sobrevive gracias a acuerdos de licencia que le proporcionan acceso al set de instrucciones de la tecnología de procesadores de Intel. Sin tener acceso a estas instrucciones, AMD no podría vender chips compatibles con la arquitectura x86. Así, todo interesado en comprar AMD necesitaría una garantía de poder seguir vendiendo procesadores x86.

Los acuerdos en sí son altamente complejos y parcialmente secretos. El acuerdo extrajudicial alcanzado en 2009 entre ambas empresas determina además las cláusulas a las que estaría sujeta a una eventual venta de AMD. Entre otras cosas, el acuerdo establece que Intel no podrá demandar sin previo aviso a los potenciales compradores de AMD. Primero será necesario negociar, y al cabo de un año caducarían los compromisos establecidos en el acuerdo extrajudicial, lo que facultaría a Intel a presentar demandas.

Esta situación lleva a suponer que los potenciales compradores de AMD deben aceptar, y prepararse, para un intenso proceso de negociaciones con Intel, sumado a posibles demandas. Esto, por definición, podría haber disuadido a Qualcomm u otros potenciales interesados.

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